Si estás leyendo estas líneas, quizás sea porque últimamente te han salido granitos detrás de los brazos o, por el contrario, los has tenido casi siempre. En cualquier caso, has de saber que pueden salir por varias razones, y que la mejor manera de combatirlos es conocer su origen, por lo que un médico especializado podrá identificar y así orientarte de la mejor manera posible para tratarlos (sobre todo si han salido de repente y sin motivo aparente).

Si eres de las que, desde la adolescencia, tienes granitos en la parte trasera del brazo o te salen de vez en cuando, hay varios pasos que puedes llevar a cabo para combatirlos. Lo más probable es que la razón, en tu caso, sea que sufres de queratosis pilaris, una acumulación de queratina en los folículos de los poros de la piel, que hace que esta no esté completamente lisa. No es molesto y tampoco es malo, pero en algunos casos puede causar incomodidad a la persona que lo sufre, porque no se siente a gusto mostrándolo.

En primer lugar, has de tener la confianza suficiente en ti misma para que esto último te dé exactamente igual, pero si quieres rebajar su presencia y tener el brazo un poco más suave, graba estos dos consejos: exfolia e hidrata. Si consigues establecer esta rutina, tu piel mejorará muchísimo. Trata de encontrar un exfoliante suave y natural, y procura que las cremas con las que hidrates esa parte sean específicas (se recomiendan fórmulas con urea o ácido láctico).

¿Tienes más tiempo y bañera en casa? Dedícate a ti misma una hora a la semana y date baños de avena (sí, como cuando en la infancia tuviste varicela), que aparte de tratar esos granitos, es muy beneficioso para la piel, pues la avena potencia la hidratación de la dermis.

¡No te pierdas nuestra galería con el paso a paso para tratar los granitos!