Todas buscamos el mismo objetivo, presumir de una piel bonita y de aspecto saludable que consiga retrasar los efectos del paso del tiempo. Sin embargo, y a pesar de que hoy en día existen a nuestra disposición miles de productos formulados con activos en tendencia por su innovación y eficacia, muchas veces, esa ayuda extra puede venir coningredientes que ya tenemos en casa. ¿Cómo? A través de mascarillas caseras para la cara.
Las mascarillas favorecen lavasodilatación, el aumento de la temperatura local y la hidratación de la capa córnea de nuestra piel; son suaves y relajantes, actúan con increíble rapidez, además de tener efectos inmediatos y visibles.
“Si bien es cierto que existen estudios sobre los beneficios de las frutas o verduras a nivel facial y corporal, en función del tipo de piel y la edad, debemos hacer énfasis en que la salud, la higiene y la belleza, tienen que estar acompañadas de una alimentación equilibrada, que involucre el consumo de frutas y alimentos sanos con el fin de lograr una belleza integral”, nos cuenta la Dra. Clarivel Ventura, equipo médico de la Clínica Mira+Cueto.
4 beneficios de las mascarillas faciales hechas en casa
- Son asequibles. Principalmente, porque podrás hacerla con ingredientes que, como te decíamos, ya tienes en casa. Y si no, suelen ser muy baratos.
- Relajan, y te permiten tener un momento para ti de relax.
- Son fáciles de hacer, aptas para las más principiantes.
- Aportan hidratación y nutrición a la piel.
Pero ¿funcionan?
Depende. Y depende de muchos factores. Como bien nos explican desde Mira+Cueto, “partiendo del hecho que cada piel es diferente, lo primero a tomar en cuenta a la hora de decidir si usar una mascarilla casera es saber qué piel tienes”.
Lo ideal es, tener una evaluación en donde se determine con exactitud el nivel de hidratación o grasa, por eso es aconsejable ponerse en manos de personas capacitadas en el ámbito estético para no correr riesgos.
No obstante, si son sencillas y basadas únicamente en hidratar, mal no causan. Aunque nuestras expertas recomiendan alejarse de los cítricos y de ingredientes que pudieran irritar, como la lima o el limón.
Una mascarilla casera para todo tipo de piel
Conseguirás una piel hidratada en pocos minutos. Además, sus ingredientes son aptos para todo tipo de pieles y gracias a las vitaminas y antioxidantes, regenera y deja la piel suave, luminosa y con una sensación de frescura. Dicho esto, necesitarás:
- 1 cucharada de miel (hidratante y antibacteriana).
- 2 cucharadas de yogur natural (calmante y exfoliante suave).
- 1/2 cucharada de aceite de oliva o de aceite de coco (hidrata y nutre la piel).
- 1/4 de aguacate maduro (rico en vitaminas y antioxidantes).
Paso a paso de la mascarilla
- Tritura el aguacate en un bol hasta que esté suave y sin grumos.
- Agrega la miel, el yogur y el aceite al aguacate, y mezcla bien hasta obtener una pasta homogénea.
- Aplica la mascarilla en el rostro limpio y seco, evitando el área de los ojos.
- Déjala actuar durante 15-20 minutos.
- Enjuaga con agua tibia y seca el rostro con suavidad.
Mascarilla casera para piel sensible
Si tienes la piel sensible, “puede ayudarte la avena por su efecto antiinflamatorio, cicatrizante, antialérgico; la patata en pieles con rojeces; una mascarilla de berenjena mantiene el equilibrio de la piel, su vitalidad y esplendor, y se recomienda en pacientes con rosácea y cuperosis, nos recomienda la Dra. Clarivel Ventura. No obstante, insiste en evitar el limón o cítricos que, aunque se usen como exfoliantes o para tratar manchas, “nos puede manchar más la piel o irritarla”.
- 2 cucharadas de avena (suaviza y calma la piel).
- 1 cucharada de miel (hidratante y antibacteriana natural).
- 2 cucharadas de yogur natural o leche de avena (hidrata y calma).
- Es opcional, pero si puedes, añade una cápsula de vitamina E (para un toque antioxidante y regenerador).
Paso a paso de la mascarilla
- Muele la avena hasta obtener un polvo fino. Si no puedes molerla, puedes usarla directamente, pero será menos uniforme.
- En un bol, mezcla la avena molida con el yogur o la leche de avena.
- Añade la miel y, si usas la cápsula de vitamina E, perfora la cápsula y vierte el contenido en la mezcla hasta obtener una pasta suave.
- Aplica la mascarilla en el rostro limpio y seco, evitando el área de los ojos y déjala actuar durante 15-20 minutos.
- Enjuaga con agua tibia y seca el rostro con suavidad.
Mascarilla casera para piel grasa
El mejor consejo que nos da la doctora es que evitemos la leche, los aceites, la manteca de cacao, “ya que solo nos van a obstruir más los poros; también el aguacate porque es muy graso y tampoco se recomienda la mascarilla de zanahoria y huevo”. También se recomienda evitar la miel como hidratante, porque podría obstruir los poros. ¿Recomendable? Usar mascarillas con fresa, pepino, avena, arcilla blanca, aceite de árbol de té.
- 3 fresas (ricas en antioxidantes y ayudan a reducir el exceso de grasa).
- 1/4 de un pepino (refrescante y astringente).
- 1 cucharada de avena (suave exfoliante y calmante).
- 1 cucharada de arcilla blanca (purifica y absorbe la grasa).
- 3 gotas de aceite de árbol de té (antibacteriano).
Paso a paso de la mascarilla
- Tritura las fresas y el pepino en un bol hasta que obtengas una mezcla suave.
- Agrega la avena y la arcilla blanca, mezclando bien hasta formar una pasta.
- Añade las gotas de aceite de árbol de té y mezcla nuevamente.
- Aplica la mascarilla en tu rostro limpio, evitando el área de los ojos.
- Déjala actuar durante 15-20 minutos.
- Enjuaga con agua tibia y seca el rostro suavemente.
Mascarilla casera para piel mixta
Las pieles mixtas comparten muchas características con la piel grasa, al igual que muchas problemáticas. No obstante, no olvides que has de hidratar las zonas más secas para encontrar un equilibrio. La mascarilla que te recomendamos es:
- 2 fresas (antioxidantes y reguladoras del sebo).
- 1/4 de un pepino (refrescante e hidratante).
- 1 cucharada de avena (exfoliante suave y calmante).
- 1 cucharada de arcilla blanca (limpia y equilibra la grasa sin resecar).
- 2 gotas de aceite de árbol de té (para zonas más grasas).
Paso a paso de la mascarilla
- Tritura las fresas y el pepino hasta obtener una mezcla suave.
- Añade la avena y la arcilla blanca a la mezcla, removiendo hasta formar una pasta homogénea.
- Agrega las gotas de aceite de árbol de té. Eso sí, solo en la parte más grasa (como la zona T: frente, nariz y barbilla), y mézclalo bien.
- Aplica la mascarilla en el rostro limpio, concentrando la mayor cantidad de la mezcla en la zona T y aplicando menos cantidad en las zonas secas o más sensibles.
- Déjala actuar durante 15 minutos.
- Enjuaga con agua tibia y seca el rostro suavemente.
Mascarilla casera para piel seca
Para la piel seca, desde Mira+Cueto recomiendan “aplicar mascarillas de avena, plátano (muy maduro), miel preferiblemente sin procesar, huevo, yogurt”. También aguacate rico en aceites grasos insaturados, capaces de aportar a la piel elasticidad y nutrición, leche entera asociada a la arcilla, levadura de cerveza (rica en vitaminas del grupo B, en potasio y calcio).
- 1 cucharada de avena (hidratante y calmante).
- 1/2 plátano muy maduro (rico en potasio e hidratante).
- 1 cucharada de miel sin procesar (humectante natural que retiene la hidratación).
- 1 cucharada de yogur natural (nutre y suaviza la piel).
- 1/4 de aguacate maduro (rico en aceites grasos que aportan elasticidad).
- 1 cucharada de leche entera (nutre la piel seca).
- 1 cucharadita de levadura de cerveza (aporta vitaminas B, potasio y calcio).
Paso a paso de la mascarilla
- Tritura el plátano y el aguacate hasta que estén suaves y sin grumos.
- Agrega la avena, la miel, el yogur, la leche y la levadura de cerveza; y mezcla bien hasta obtener una pasta homogénea.
- Aplica la mascarilla en el rostro limpio, evitando el área de los ojos, y déjala actuar durante 15-20 minutos.
- Enjuaga con agua tibia y seca tu rostro suavemente.