El frío aterriza en España y es hora de sustituir las cremas frías por caldos y cenas más calentitas. A este cambio de despensa también se unen las infusiones, que algunas abandonamos durante la temporada estival y ya va siendo hora de recuperar.
La mayoría de estas bebidas son fuentes antioxidantes que ayudan a cuidarnos por dentro y por fuera de manera natural y sin esfuerzo, como el té kukicha, uno de nuestros últimos descubrimientos que ya se ha convertido en mi favorito.
Se trata de un té japonés que se ha popularizado por su bajo contenido en cafeína y un gran aporte nutricional. También conocido antiguamente como 'el té de los pobres' entre los nipones, hoy ponemos esta maravilla a examen y te contamos por qué debes sumarla a tu rutina de noche.
El té kukicha: el gran desconocido que despierta nuestro interés
Este té es tan curioso que no entendemos por qué no lo hemos descubierto antes; y es que se elabora con el sobrante del resto de tés. Tal y como explican desde la tienda especializada Punto de Té (Madrid), el kukicha se compone con los tallos sobrantes de las hebras de otros tés, cuando se recogen, se "limpian" y se preparan para distribuirlos.
Pero no te dejes llevar por prejuicios pensando en que esta técnica le resta algún tipo de prestigio al kukicha, porque, justamente, esto es lo que lo convierte en uno de los más recomendados a nivel nutricional.
Entre sus beneficios...
- Tiene muy poca cafeína, por lo que es ideal para tomarlo por la noche.
- Contiene altas cantidades de calcio y vitaminas (C, A y B).
- Deshincha y ayuda a hacer la digestión
Una joya antioxidante
El kukicha es un té con altos niveles de vitamina C, uno de los antioxidantes más potentes que conocemos hasta el momento, indispensable para la síntesis de colágeno y la prevención del envejecimiento de nuestra piel. Es por eso que a este té japonés se le atribuyen propiedades antiedad, como ocurre con el té blanco o el verde.
A esta vitamina C se le suma la vitamina A, que se la conoce como retinol y que también contiene propiedades antioxidantes. ¿Te suena de haberlo visto en cremas y sérums? Eso es porque al retinol se le considera un gran activo antiedad. Esto se debe a que, además de proteger a las células del envejecimiento, ayuda a la renovación y es capaz de paliar, en cierta medida, el daño causado por los radicales libres.
También deshincha
Al kukicha se le considera un interesante alcalinizante, lo que significa que neutraliza los ácidos y minerales del cuerpo, promoviendo una mejor digestión y disminuyendo la pesadez de estómago. Así que sí, es una bebida perfecta para tomar después de cada comida.
Prepáralo así
No tiene secretos a la hora de prepararla. Su tiempo de reposos es de unos 5 minutos, así que calienta el agua sin que llegue a hervir para que los tallos no pierdan sus propiedades y mantenla tapada para que infusione.
Verás que tiene un color amarillento y un aroma muy suave. Puedes tomarla con leche, pero si es la primera vez que la bebes, te animo a probarla sola. Notarás un sabor delicado y dulce sin necesidad de añadir edulcorantes u otros ingredientes.
Tómala antes de acostarte para desinflamar el vientre y relajar el sistema nervioso. Si eres una persona a la que le cuesta coger el sueño, notarás cómo el calor de la bebida y su gusto dulce te relajan más rápido.