Periodista, reportera, bloguera, it girl y ahora también, mamá. Así es esta toledana nacida el 3 de febrero de 1984 en Corral de Almaguer.
Sara Carbonero es todo un referente de moda e inspiración para muchas mujeres. Su cuenta de Instagram, que ya suma 1,5 millones de seguidores, es todo un libro de buen gusto y estilo. Las fotografías que sube, con gran acierto, nos hacen querer copiar sus looks. Empezamos a fijarnos en ella como it girl cuando lucía las famosas pulseras decenario, aquellas que toda fashion victim quería llevar en su muñeca. Sara convirtió esta sencilla pulsera de hilo en lo más chic del verano de 2010. En 2013 comenzó a escribir artículos en su blog personal “Cuando nadie me ve”. Un espacio de la revista Elle en el que comparte sus secretos para estar radiante, da consejos sobre belleza, relata su experiencia como madre, cuenta sus proyectos personales y profesionales y sobre todo, habla de moda y tendencias. Actualmente esta influencer tiene, junto a dos amigas, un negocio online de moda con un concepto alejado del fast-fashion . Slow Love es una tienda multimarca donde ofrecen artículos de moda, belleza y decoración; basándose en la producción sostenible, la artesanía y uso de tejidos naturales. Todos estos pinitos en el mundo de la moda la llevaron a presentar la primera edición del fashion talent televisivo “Quiero ser”.
Sara tenía un sueño: ser periodista. Muy jovencita se trasladó a la capital para estudiar periodismo en la Universidad Complutense de Madrid. Mientras cursaba sus estudios entró como becaria en Radio Marca. Después vinieron Cadena Ser, La Sexta, donde se encargaba de la sección de deportes de los informativos y Telecinco, su gran catapulta hacia el éxito profesional.
Su gran amor llegó en 2010 con el ex-portero del Real Madrid, Iker Casillas. Periodista y futbolista, ambos muy queridos, forman una de las parejas de celebrities más admiradas de nuestro país. En enero de 2014 llegó a sus vidas el pequeño Martín Casillas Carbonero, consolidando aún más la relación. En 2015 la pareja abandona España para trasladarse a la preciosa ciudad de Oporto al norte de Portugal, puesto que, Iker fue fichado por el FC Porto. Tras varios años de noviazgo y convivencia en común, la pareja decidió dar el gran paso y casarse en 2016 en una boda íntima y secreta. Poco tiempo después, en junio de 2016, vino al mundo Lucas, el segundo hijo de la pareja.