Animal print, dorados, glamour, brillo, lujo... son solo algunas de las características que comparten las antiguas civilizaciones egipcias y la nueva colección de Lola Casademunt: Iconic Luxor. Todo un homenaje a su cultura, a su simbología, a su color y a sus icónicas vestimentas desde una reinterpretación estilística moderna y llena de feminidad.
«Todo viene porque hace un año estuve en Egipto y vi cómo había en las paredes del interior de las pirámides hombres vestidos de animal print; es nuestra esencia y pensé que de ahí tenía que salir un desfile», nos explica Maite Casademunt, directora creativa de la firma catalana.
Vestidos vaporosos, con cut-outs, plisados, con capas o inclusos conjuntos de dos piezas con shorts y americana son los principales diseños que se han lucido con fuerza sobre la pasarela. Pero la guinda del pastel son los vestidos joya, adornados con beadings o incluso envueltos en lúrex y foil. «Hemos utilizado los jacquards de animal print en arganzas y en tules y un estampado geométrico inspirado en la civilización egipcia; también hemos añadido mucho material laminado con dorados, pedrerías... Todo muy rico y glamuroso», nos explica la diseñadora.
Además del dorado, tono estrella de la colección, los colores principales que han teñido con glamour la pasarela han sido los tonos tierra y beige, añadiendo también un toque de vivacidad con limas, fucsias y malvas, «los colores energía que forman parte del ADN de la firma».
«El total look es todo nuestro», afirmaba Maite Casademunt. Desde vistosos pendientes con el logo de la casa hasta las sofisticadas sandalias de tacón doradas, pasando por unos grandes bolsos de mano, formaban los complementos perfectos para crear ese ambiente lujoso y refinado en el desfile.
A pesar de derrochar grandes cantidades de feminidad y empoderamiento, Lola Casademunt se va adentrando paulatinamente en el terreno de la moda masculina. «El tema unisex me encanta y yo ya quiero, en los últimos desfiles, ir poniendo la imagen de los chicos para que la gente ya vaya relacionando nuestra marca con la moda de hombre también; es un pequeño trabajo que vamos haciendo», proseguía la creativa.
Como broche de oro, y según aconsejaba la diseñadora, existe un vestido que es mejor verlo en pasarela por el movimiento que tiene. «Es un vestido que tiene un fluido que parece líquido que va a ser la pieza de cierre. Con la música ya te dejas ir y cuando sale nuestra estrella, que es Nieves Álvarez, que es como una diosa, es cuando se hace el silencio y empieza la magia». Y, efectivamente, la top lo lució con gran elegancia y poderío al ritmo de una música que nos transportaba al más estiloso Antiguo Egipto.