El pasado 19 de mayo de 2018, la ex actriz Meghan Markle se casó con el Príncipe Harry. Desde ahí, la estrella de la televisión pasó a formar parte de la familia real británica, automática y oficialmente.
Pero incluso antes de que eso sucediera -y de que organizara una fiesta de despedida de Zara- Meghan Markle ya apuntaba maneras royal. Y, si no te lo crees, fíjate en cómo escribía y cómo su letra es digna de cualquier miembro de la realeza.
La Revista InStyle, en su versión americana, ha recuperado del fondo de un cajón una carta escrita a mano por la -ahora- Duquesa de Sussex donde, en el año 2011, agradecía a uno de los editores una entrevista que tuvo con la revista. Y si esto no demuestra que Meghan ha nacido para ser miembro de la realeza e increíblemente polite, no sabemos qué lo hará.
La carta 'royal' escrita por Meghan Markle
La carta que ves aquí arriba es la protagonista de nuestras sospechas y esto es exactamente lo que escribió Meghan Markle en su momento: "Querida Karen, ha sido un verdadero placer sentarme a hablar contigo y con otras señoritas de InStyle. No puedo esperar para leer tu artículo y escuchar tu opinión. Gracias por el apoyo. Besos y abrazos, Meghan Markle".
Dicha carta está datada del 13 de abril de 2011, justo unos meses antes de que la serie Suits se estrenara en Estados Unidos en el mes de junio (y cuando todavía tenía Instagram personal). Aunque la letra es "tan de la realeza" como parece, en realidad se debe a que Meghan Markle trabajaba como calígrafa freelance entre casting y casting para dar un empujón a su carrera como actriz.
En el año 2013 le dijo a Glamour que fue a un colegio católico de chicas y que fue ahí donde aprendió todo lo referente a la caligrafía y la letra. Esas habilidades se volvieron útiles más tarde, según contó a Esquire en 2013. Y es que fue ella la que escribió las invitaciones de la boda de Robin Thicke y Paula Patton, así como las felicitaciones de navidad que Dolce and Gabbana envíaba a las celebrities. Y, según la NBC, también enseñó caligrafía en una tienda Paper Source en Beverly Hills.
Aquí vemos a Meghan Markle enseñando a Larry King algo de caligrafía durante una entrevista.
Dejando a un lado lo de su "letra royal", mandar una carta escrita a mano después de una entrevista no es algo habitual, pero sí muy elegante. No nos extraña que a la Reina Elizabeth le haya caído en gracia desde el principio -al menos hasta que se abrió una cuenta de Instagram con el príncipe Harry, que no sabemos cómo le habrá sentado-.