Con el cambio de temporada no solo cambiamos el armario, sino que nuestro cuerpo lo hace también. Nuestra piel es la primera en notar la llegada del invierno, es por eso que hay que cuidarla más que nunca para mantenerla hidratada y calmada. Con el frío disminuye la producción de grasa y la piel se vuelva más fina y, en consecuencia, mucho más débil.
La que más cambia es la de nuestro rostro. Se deshidrata, se seca ynuestra crema hidratante de cada día no parece suficiente. Hay que seguir una rutina de piel diferente a la que seguimos en otra época del año y nosotros tenemos los 10 mejores consejos para cuidarla y protegerla del invierno.