Cuentan que la actriz Lucille Ball (protagonista de la pionera serie I love Lucy) fue castaña hasta que la estilista Irma Kusely le dijo que tenía cara de pelirroja y le propuso cambiarle el color del pelo. Este tono sería el que le catapultaría al estrellato y por el que entró en el olimpo de los dioses (y las diosas) hollywoodenses.
Y es que, para llevar el pelo de color rojo, cobrizo, caoba o burdeos hace falta tener un extra de personalidad. Tanto que hay quienes se aproximan al tono poco a poco, como María Fernández Rubíes, o quien se atreve al gran cambio de manera inesperada, con el consecuente golpe de efecto. Se estima que solo entre el 1 y el 2% de la población es pelirroja de manera natural y el resto lo son gracias a tintes, mechas y obra y gracia de los peluqueros.
El último desfile de Chanel, donde se pudo ver una multitud de gama de pelirrojos en muchas de sus modelos, y el cambio de look de Kendall Jenner, de morena a pelirroja, auguran que el rojo será el color de pelo más demandado en peluquerías en los próximos meses.
Cobrizo
"Los cobrizos son siempre apasionantes y apasionados y en estos momentos necesitamos más que nunca vivir con emoción y rebeldía según nuestra personalidad. Este tono es muy natural, pero también inconformista. Como en la vida, se trata de encontrar la intensidad que va con cada personalidad", sugiere Alexander Kiryliuk de SK Style Barcelona. Además, este tono puede hacer que tu tez se vea más iluminada, sobre todo si tienes la piel clara.
Pelirrojo oscuro
La gama de pelirrojos más oscuros está especialmente indicada para mujeres castañas o morenas. "Este tono que puede tomar matices del marrón consigue revitalizar la melena, un gran cambio, con poco esfuerzo. Podemos hacer destacar más los matices rojos, naranjas o castaños para crear un color único adecuado a nuestra piel", explica Felicitas Ordás de Felicitas Hair.
Pelirrojo ‘ blorange’
"El blorange es una mezcla del rubio y el naranja. Los rubios se han convertido en la base perfecta para mezclarlos con tonos más llamativos y esta combinación, además, crea un efecto buena cara, nos hace alegres y entusiastas a la vez que cargados de luz", asegura Raquel Saiz de Salón Blue.