Hay instantes que huelen a perfume y cuando vives lejos de tu hogar natal, parece que buscas con más ahínco todos esos aromas que te evoquen algo familiar. El olfato es uno de los sentidos que más estimula la memoria, aseguran los expertos de WikiParfum. Yo no podría estar más de acuerdo.
A veces, sencillamente, es el olor a mar, a tierra mojada por la lluvia, a madera, ese plato que te traslada a un domingo cualquiera en algún otro lugar… Ni qué decir cuando lo que te llega es el aroma de una fragancia conocida. Entonces el tiempo se detiene por un momento.
Los especialistas en perfumería aseguran que nuestra memoria olfativa se comporta como un verdadero álbum de recuerdos. Algo que es único, personal e intransferible. Nos vincula con nuestro lado más sensible y es capaz de hacernos viajar a nivel emocional a través del olfato.
“Gracias a esta somos capaces de escoger un perfume entre un millón”, revelan en WikiParfum. Y es que sólo ese aroma logra despertar algo en nosotras cuando lo olemos e incluso consigue hacernos sentir mejor.
El icónico perfume de Lancôme que conquista a tres generaciones en mi casa
Pues todo lo que os he contado anteriormente, me sucede a mí con Trésor Eau de Parfum de Lancôme. Una fragancia que comparten mi madre y mi abuela desde los años 90 y que ahora también es uno de mis perfumes de cabecera por su aroma floral con notas frutales y ambaradas.
Este perfume icónico es una de las fragancias más vendidas en todo el mundo desde que se creó en el año 1990. Sophia Grojsman, la perfumista artífice de su éxito, buscaba que representase la encarnación perfecta del amor en todas sus facetas.
Con esta premisa, creó una fragancia suave, delicada y elegante. De esas que dejan un aroma muy característico en la piel que recuerdas a la perfección a pesar del paso del tiempo. Grojsman aseguró: “Me inspiré en aquellas mujeres tan femeninas que siempre dejan huella... Trésor es un perfume compuesto por materias primas nobles, que saben revelar una extraordinaria estela olfativa completa, que invita a abrazar”.
En concreto, sus notas olfativas son:
- Notas de salida: pétalos de rosa, flor de albaricoque y flor de melocotonero.
- Notas de corazón: muguete, vainilla, heliotropo e iris.
- Notas de fondo: madera de sándalo y almizcle.
Por si su aroma romántico y duradero te parecía poco, su frasco es digno de conservar. Para su creación se inspiraron en la alta joyería, de esta forma adquiere una forma piramidal, a modo de joya cristalina, que captura y refleja la luz. La representación literal de un tesoro de cristal (de ahí su nombre).
Otros 2 perfumes clásicos que despiertan los sentidos
Para mí es Lancôme, pero para muchas otras personas sus recuerdos les unen a estos otros dos perfumes que suman décadas (e incluso más de un siglo) de historia.
La propia Gabrielle Chanel encargó a Ernest Beaux en 1921 un perfume que supusiese la esencia misma de la feminidad. El resultado fue este bouquet floral aldehído contenido en un frasco de líneas minimalistas emblemático. Su aroma se compone en torno a la rosa de mayo y el jazmín, junto con acordes hesperidados y empolvados. Como colofón, un punto de vainilla para dejar estela.
Shalimar fue creado en 1925 por el propio Jacques Guerlain, inspirado por la historia de amor entre el emperador Sha Jahan y la princesa Muntaz Mahal, para quien encargó construir el famoso Taj Mahal y los jardines de Shalimar.
Esta fragancia pertenece a la familia oriental y cuenta con bergamota, mandarina, cedro y limón como notas de salida. El corazón de pachuli, jazmín, rosa y orris da paso a un fondo de vainilla, benzoina y cuero. Ojo, su frasco, diseñado por Raymond Guerlain, ganó el primer premio en la Exposición Internacional de Artes Decorativos de París de 1925.
Sigue nuestro canal de Whatsapp para estar al día de la última hora en moda y belleza.
Cuando compras a través de nuestros enlaces podemos ganar una comisión Más información.