Los expertos afirman que proteger nuestra piel contra los rayos del sol deberían ser nuestros deberes de cada día, a lo largo de todo el año. Los UVA y UVB no solo son nocivos durante el verano. Siendo esto así, aunque sabemos que ninguna cumplimos, existen cremas, bases y polvos de maquillaje con SPF que bien nos pueden hacer el servicio un 21 de enero, y que podemos incluir en nuestra rutina de make up sin que supongan un paso adicional.

Pero lo que sí hay que tener en cuenta es la protección extra que tenemos que aportar a nuestra piel durante la primavera y, sobre todo, en verano. Ya no valen esas locuras que hacíamos cuando éramos adolescentes, ¿qué es eso de tomar el sol sin nada de crema o aplicar aceites con protección muy baja para ponernos más morenas? Stop! Tu piel estará contigo toda tu vida y, aunque a simple vista no parezca que los rayos del sol la dañan, la epidermis (la parte más superficial de la piel) tiene memoria, y va registrando todos los excesos. Por supuesto que –por lo general– nos solemos ver más favorecidas cuando cogemos algo de color, pero no por estar más horas al sol o no ponerte protección vas a estar más morena. Utilizando las cremas adecuadas, el proceso de bronceado será más lento, pero más seguro, que es lo que te tiene que importar de verdad.

¿Y la piel del rostro?

Lo más adecuado, sobre todo si tienes piel sensible, grasa o con acné, es utilizar solares distintos para el cutis que para el resto del cuerpo. Para saber cuál es el más apropiado para tu piel, hemos seleccionado varios solares que podrás incluir en tu neceser para llevar a las primeras escapadas a la playa y en tu maleta este verano.

Recuerda que protegerse es esencial y que, en realidad, la salud de tu piel está en tu mano.