Cuando elegimos una crema antiarrugas esperamos muchas cosas de ella, que rejuvenezcan y quiten años al instante, que iluminen o que consigan reducir las primeras arruguitas porque contienen activos como el retinol.
Y, cuando conseguimos encontrar una que funciona, somos fieles y devotas. Pero, ¿qué pensarías si te dijéramos que no le estás sacando todo el partido que podrías a tu crema antiedad? Aquí te contamos algunos truquitos para que puedas maximizar la duración y los efectos de tu cosmético favorito, la crema antiarrugas. Eso sí, siempre teniendo en cuenta que, “las cremas están planteadas de media para durar de 3 a 6 meses. Podemos conseguir usar algo menos de cantidad de producto si complementamos a la crema con un suero que incluya alta concentración de activos”, tal y como nos cuenta Elisabeth San Gregorio, directora técnica de Medik8.
Tips para sacar más partido a las cremas
Para Raquel González, cosmetóloga y directora de educación de Perricone MD, el mejor truco "es la constancia, por un lado, y por otro, asegurarnos que el cosmético responde a nuestra preocupación. Cuando hablamos de signos de edad avanzada, son muchas las opciones: desde piel extremadamente seca a arrugas marcadas y líneas de expresión, hiperpigmentación o manchitas, falta de firmeza en determinadas áreas. Por ello, es tan importante saber qué nos preocupa y, con eso, procederemos a elegir productos específicos con ingredientes como los retinoides para arrugas y firmeza, ácido hialurónico para hidratar, vitamina C para iluminar y reducir manchas…” afirma la experta.
Si cumples a rajatabla los mandamientos de la rutina beauty y te aplicas mañana y noche crema en el rostro, seguro que te gustaría saber algunos trucos para hacer que tus cremas duren más y sean más efectivas. Hemos hecho una pequeña labor de investigación para traerte los siete que mejor funcionan. ¡Apúntalos todos!
Intenta no contaminar el contenido
Parece una tonteria, pero cada vez que tocas la crema con los dedos estás dejando la puerta abierta a miles de gérmenes que pueden contaminar las moléculas que la componen y hacer que su efecto disminuya o se anule. Para evitarlo puedes utilizar una espátula de plástico que deberás enjuagar en agua caliente y secar para preservar tu crema antiarrugas en condiciones óptimas. También puedes elegir cremas en tubo o que lleven dispensador para evitar su oxidación.
Los tarros, mejor opacos
Si eliges una crema, que sea en un tarro opaco. Esto ayudará a que los ingredientes –sobre todo las que incluyen Vitamina C–de su composición no se alteren por la luz del sol. Además, tendrás que guardarlas en un lugar seco y alejado de la luz directa si no quieres acabar con los beneficios de tu crema antiarrugas favorita.
Aplica la crema con un masaje
Si eres de las que se aplica la crema con la punta de los dedos en lugares estratégicos del rostro y luego extiende sin más, apunta esta nueva rutina porque con menos producto conseguirás más efecto.
Pon una pequeña cantidad de crema antiarrugas en la mano, caliéntala frotando suavemente ambas palmas y, a continuación, pósalas en el rostro y presiona suavemente comenzando desde el centro del rostro hacia el exterior. De esta manera harás también un pequeño drenaje linfático que descongestionará la zona. ¡Dos por uno!
Para aprovechar la crema en tubo
¿Prefieres usar cremas en formato tubo? Es lo mejor para aprovechar hasta la última gota de producto. Para exprimirlo aún más, cuando se haya acabado puedes cortar el tubo por el extremo más ancho y comprobar si queda más crema. ¡Seguro que sí!
Atención a las cremas con retinol
Es uno de los ingredientes más poderosos de la industria cosmética por su acción alisadora y antiarrugas. Eso sí, si te decides a usar una crema con retinol no lo hagas todos los días ya que debes dejar que tu piel se acostumbre gradualmente a este poderoso ingrediente. Comienza aplicando el retinol (si la fórmula también lleva niacinamida, mejor que mejor) dos veces por semana en un porcentaje muy bajo y observa cómo reacciona tu piel. Si lo toleras bien, aumenta la dosis y ve aumentando también los días por semana que aplicas este activo.
Lo mejor es complementar tu crema con retinol con principios que apoyen la renovación de la piel, "alternándolos de manera que no sobre entrenemos el tejido. Es ideal, para ello, complementar con una crema o suero con vitamina C por la mañana, por ejemplo, o un par de veces aplicar exfoliantes como el glicólico o el láctico. Trabajando en sinergia, conseguiremos optimizar la acción regeneradora de la crema”, explica Estefanía Nieto, directora técnica de Omorovicza.
Refuerza el resultado con nutricosmética
Es muy sencillo, solo tienes que probar a tomar suplementos para reforzar la acción antiarrugas en tu crema. Muchos de estos suplementos contienen antioxidantes naturales que facilitan la síntesis de colágeno, aumentan el número de fibroblastos o detienen y controlan la producción de enzimas que favorecen el envejecimiento de la piel. Los hay en cápsulas y en ampollas bebibles, dales una oportunidad porque se lo merecen.
Utiliza la crema antimanchas solo por la noche
Las que usen una crema antimanchas harán bien en aplicarla solo en la rutina de noche, así te aseguras de que los activos despigmentantes actúan en profundidad y que la acción antimanchas no interferirá con los rayos solares.
Ahora, ya sabes ocho gestos que te podrán ayudar a sacarle el máximo partido a tu crema antiarrugas. ¿Te animas a ponerlos en práctica?