No es solo cuestión de verlas como una sucesión de imágenes que te lleven a un desenlace más o menos incierto. Devoramos series con verdadera fruición con la misión de llegar al fin y gozar o juzgar o arremeter contra la resolución.

 Nos hemos convertido en jueces de historias larguísimas que perduran en el tiempo y nos olvidamos de todo lo que nos puede dar una serie. Porque, ¡hey!, puede ser mucho.

Esta cosa del entretenimiento multidisciplinar nos hace ver mal las series. “Me la pongo doblada para así poder mirar el móvil o cenar tranquila o chequear mis redes sociales”. Como estas excusa hay mil. Excusas baratas que desprestigian obras seriales de todos los tiempos.

 Por eso, y por si quieres aprovechar el tirón para entrenar tu inglés, hemos hecho una lista de series que solo hay que ver en VO: porque pierden valor y gracia; o porque son ideales para reforzar tu inglés.