Caracterizado por tener una banda o tiras que se atan alrededor del cuello, dejando los hombros y la parte superior de la espalda al descubierto, el escote halter es elegante, sexy y está de moda. Por lo que, las danesas (y las más elegantes) no han dudado en sacarlo a la calle. 

Sin embargo, este tipo de escote puede ser bastante controvertido si no se usa bien en el momento adecuado. Puede favorecer a una amplia variedad de formas de cuerpo y estilos personales, pero suele destacar especialmente en ciertos casos. 

Escote halter: cuándo y cómo llevarlo

Las estilistas son claras: la moda tiene reglas (que se pueden romper). Por lo que, en estos casos lo que manda es la confianza en una misma y la seguridad.

escote halter
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No obstante, el escote halter suele favorecer especialmente:

  1. A aquellas personas con hombros estrechos. La razón es simple: puede crear la ilusión de hombros más anchos, lo que equilibra la figura si tienes hombros más estrechos en relación con tus caderas.
  2. A aquellas personas con busto de pequeño a mediano. El escote halter puede realzar y destacar el busto, aumentando ópticamente el tamaño. 
  3. Si tienes la espalda y brazos tonificados. Te lo explicamos. A menudo, este tidpo de escote incluye la parte superior de la espalda y los brazos. Al tener esta parte tonificada, el resultado favorece. No obstante, también puedes llevarlo si no es tu caso y no te genera complejo.
  4. Si tienes el cuello largo. Las personas con cuellos largos suelen lucir muy bien con escotes halter, ya que, al ser un escote cogido a esta parte, puede achatarlo. No obstante, si tu cuello es corto o tienes el rostro redondo, la clave está en despejar la zona de los hombros. 
  5. En eventos elegantes o casuales. Puedes usarlo en ambos casos. Todo depende del diseño del vestido o la prenda en cuestión. Por lo que, es bastante versátil. 

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