Formo parte del grupo que hoy día todo el mundo conoce como generación Z, más comúnmente llamado gen Z. Eso me da potestad para decir que los bolsos se han convertido en el accesorio favorito de las chicas y chicos que buscan un look sencillo, pero con mucha personalidad. En otras palabras: es el complemento en el que más invertimos.

Como es el accesorio favorito en el que decidimos invertir, les pedimos a nuestros bolsos características que, quizás, han pasado desapercibidas en otras generaciones. Nuestros bolsos tienen que tener el tamaño perfecto, pero no basta solo con eso, sino que además tienen un discurso propio que ensalce rasgos de la personalidad de la persona que lo lleva.

Lo único que quiero decir con esto es que nunca verás a una chica clásica del gen Z con un bolso que llame excesivamente la atención, al igual que no verás a una moderna fan del estilo dosmilero con un bolso clásico que ahonde en alguna de las hormas más icónicas.
No obstante, como cualquier persona en el mundo, tenga la edad que tenga, no somos inherentes a algunas de las tendencias con más voz y presencia de nuestro contexto actual. Es solo que las integramos de forma orgánica, tratando de conseguir lo mejor de los dos mundos.

Los diseñadores tienen esto bastante claro, y satisfacen nuestras necesidades con nuevos modelos remasterizados que persiguen nuestras demandas. Hemos visto como Jimmy Choo añade lazos a bolsos de fiesta, como Gucci, Marc Jacobs, Vuitton, o Ferragamo apuestan por el toque vintage que tan de moda han puesto las chicas bohemias, o como los modelos clásicos vuelven con más fuerza que nunca para darle al estilo minimalista su mejor aliado.

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Cinco tendencias (y cinco bolsos) que llevan la GenZ