De Hermès a Chloé: te contamos por qué necesitas unos zuecos en tu armario esta primavera

El zueco, ese testigo mudo de la moda que ha visto pasar siglos, décadas y tendencias, vuelve a pisar fuerte en las calles y pasarelas de la primavera-verano 2025. Ni reliquia ni novedad, es el it shoe que sintetiza lo artesanal con las tendencias más actuales y los procesos más innovadores. Su secreto: una versatilidad casi camaleónica. ¿Acaso hay otro calzado que pueda transitar del campo a la ciudad, de lo boho a lo athleisure, sin perder un ápice de autenticidad? Esta temporada, diseñadores Hermes, Chloé o Miu Miu lo demuestran: el zueco es la demostración de estilo sin fecha de caducidad.  

Si en el pasado fue símbolo de rebeldía contracultural o de estética hippie-chic, hoy se reinventa como un puente entre lo clásico y lo experimental. Su suela de madera —ya sea en tonos crudos o teñida de colores audaces— se ha convertido en un lienzo donde las firmas exploran texturas, materiales y siluetas. Pero en 2025 llega en formas sofisticadas e inspiracionales. 

Del taller a la pasarela: los zuecos como prenda de estatus 

La primavera-verano 2025 confirma que el zueco ha dejado de ser un mero recurso boho para convertirse en un objeto de deseo. Ulla Johnson, fiel a su ADN de elegancia orgánica, presenta una versión que parece sacada de un cuadro, con suela de madera clara, tachuelas redondeadas que imitan joyas rudas y tiras de cuero en el tobillo que aseguran comodidad sin sacrificar estética. Su paleta —blanco, negro, marrón— evoca la calma de un atardecer en Provenza, pero con un giro moderno: los tonos neutros se combinan con tejidos fluidos y accesorios estructurados, demostrando que lo rural y lo urbano pueden coexistir.  

Miu Miu, siempre maestra de la contradicción, subvierte las reglas con un diseño plano y minimalista. ¿El detalle que lo catapulta a virales? Un accesorio de punto que envuelve el tobillo como un guiño entre calcetín y escultura textil. Aquí, la madera se tiñe de rojo cereza, rosa helado o blanco cremoso, mientras el charol y el ante añaden un toque de irreverencia. Es un zueco que habla el lenguaje del streetwear, pero con acento italiano. Perfecto para quienes buscan romper moldes sin renunciar al confort.  

Hermès, por su parte, eleva el arte de lo esencial. Sus zuecos, tallados en piel suave, abrazan el pie con precisión de sastre. El modelo en negro —un clásico reversionado— se combina con tejidos etéreos, demostrando que este calzado puede ser tanto la base de un look urbano como el complemento de un vestido de aire romántico. La clave está en los detalles: un empeine ajustado al dedo pulgar que dibuja siluetas limpias y sofisticadas.  

Pero si hay un diseño que resume el espíritu de la temporada, es el de Chloé. Bajo la dirección de Chemena Kamali, la firma parisina fusiona la rusticidad de la madera grabada con la transparencia futurista del PVC. El resultado es un zueco que parece flotar: la suela, tallada con motivos orgánicos, contrasta con una parte superior que deja ver el pie como un lienzo. Es un híbrido entre lo ancestral y lo vanguardista, ideal para quienes quieren llevar el boho al siglo XXII.  

Cómo llevar unos zuecos en 2025

La verdadera magia de esta tendencia radica en su capacidad para mutar según el contexto. Las más audaces han descubierto que los zuecos son el antídoto perfecto contra la monotonía. ¿La fórmula infalible? Jugar con los contrastes. Imagina un pantalón deportivo oversize con unos zuecos de madera, o un vestido mini de tul combinado con zuecos de plataforma en PVC transparente: un efecto óptico que estiliza las piernas y desafía las leyes de la gravedad.  

Para las puristas del boho, la paleta de marrones, beiges y blancos sigue siendo territorio seguro. Pero la novedad está en cómo integrarla en estilismos que mezclan épocas y texturas. Un vestido fluido de algodón, un bolso cargo y unos zuecos de ante en tono caramelo, crearán un look con un toque Y2K fascinante. Otra apuesta segura para los zuecos es combinarlos con prendas denim, consiguiendo equilibrar lo rústico con lo urbano, lo vintage con lo futurista.  

Por otro lado, los modelos cerrados en empeine y abiertos en talón —como los de Hermès— funcionan como una sandalia elevada, ideal para transiciones de día a noche. Los que incorporan tiras en el tobillo añaden un toque de delicadeza, mientras que las plataformas en madera clara alargan visualmente la silueta. Eso sí, los expertos coinciden en que no debemos sobrecargar. Unos zuecos con carácter piden prendas sencillas pero bien cortadas, donde ellos sean el centro sin gritar.  

El resurgimiento del zueco en 2025 no es casual en un momento en el que la moda oscila entre la nostalgia y la innovación. Más que un calzado, es un objeto con historia, capaz de adaptarse a los códigos actuales sin traicionar sus raíces.