Aitana Ocaña: "Quiero reflejar que las mujeres podemos hacer lo que nos propongamos"

Hace solo tres años estaba comiendo aguacates en un concurso de televisión y hoy hace colaboraciones con Katy Perry o David Bisbal. Así de rápida va la vida de Aitana (Sant Climent de Llobregat, 1999), el flequillo más famoso de España. Intentar seguir su día a día es misión imposible. No hay forma de estar al tanto de cada noticia, cotilleo o polémica que protagoniza. Un día es su colaboración para una marca de belleza de prestigio; otro, su línea de ropa con mensajes que algunas consideran poco edificantes para sus fans; y luego, hablando de lo que importa, de esa cosa llamada música, está el lanzamiento de su segundo disco, '11 razones'. Charlamos con Aitana, la protagonista de nuestro número de enero.

Aitana con top y bermudas de Balmain y sandalias y pulsera de Versace en la portada de enero 2021 de InStyle.

Ella lo ve como algo natural. “Recuerdo que mi prima Olga me dijo cuando cumplí 20: ‘A partir de ahora se te va a pasar el tiempo más rápido que nunca’”. Un año después, Aitana es una cantante que se muestra sorprendentemente ambiciosa y muy alejada de la adolescente frágil que encandiló a España en el resurgir de Operación Triunfo. Ha cambiado de vida, ha cambiado de domicilio, ha cambiado de pareja y ahora también de estilo musical. “11 razones es más punk, un poco cómo la música que hacían a principios de siglo Avril Lavigne o Simple Plan”. Música joven, energética y sin tiempo para respirar. Como Aitana Ocaña.

InStyle. 2020 ha sido horroroso, pero tú has sido la cantante más escuchada en streaming durante el año del confinamiento. ¿A qué crees que se debe?

Aitana. A que mi música es muy optimista. También he tenido la suerte de colaborar con personas increíbles como David Bisbal, Sebastián Yatra, Reik, Danna Paola... Y a la gente le ha llamado la atención. A mí me hace mucha ilusión, porque en España tenemos un 'nivelazo' y me siento orgullosa de estar en una lista con artistas tan jóvenes como C. Tangana, Rosalía, Lola Índigo, Omar Montes... Es música fresca.

Aitana lleva top de cuello halter de Replay y minifalda de cuero con cremalleras de Dsquared2. El truco para sellar el maquillaje son los polvos compactos Encre De Peau All Hours Setting Powder de YSL Beauté. 

Y ahora llega 11 razones, tu segundo disco, con más signos aritméticos que un cuaderno de repaso de Vacaciones Santillana...

Está compuesto como una fórmula matemática en la que cada canción es una razón por la que una relación termina. Me sale mucho más fácil escribir sobre el desamor que sobre estar enamorado.

¿Y de dónde has sacado la inspiración? Porque las cosas con Miguel Bernardeau, bien, ¿no? ¡No nos asustes!

¡Sí! 11 razones no es la historia de mi vida. Yo tengo una pareja, llevo dos años con él y estoy muy feliz, esa es la realidad. Pero lo que me ha inspirado es imaginarme una relación que se acaba. Creo que tanto los actores como los músicos somos muy sentimentales. Yo, por lo menos, me considero muy dramática. Me encanta llevarme a situaciones extremas. Estoy triste porque me baja la regla y me pongo a escribir algo triste. O me imagino que estoy mal con mi novio dentro de mi cabeza. Es la manera que tengo de expresar y sacar fuera muchísimas cosas.

En un año tan raro, ¿cómo ha afectado la pandemia a la producción del disco?

Escribí las canciones en cuarentena, pero no tenía micro para grabar. Hemos trabajado vía Zoom. Ha sido muy diferente a Spoiler (su anterior disco de estudio), en el que cada canción era con un productor diferente y trataba de probar cosas nuevas. Aquí he buscado un concepto artístico con la ayuda de los productores, Mauricio Rengifo y Andrés Torres. Ha sido una locura, pero he tenido mucho tiempo para escribir, para saber qué melodías funcionan y cuáles no, qué concepto artístico buscaba, qué fotógrafo quería, qué diseñador, qué videoclips...

¿Así que te has encargado de todo?

Si mi cara va a estar en todas partes, tengo que supervisar hasta el mínimo detalle: grabación, sesiones de fotos, merchandising... TODO.

Insistes en que el disco es un cambio con respecto a la Aitana que conocemos. ¿Qué queda de la ‘triunfita’?

Es un período que a veces veo muy lejos y otras muy cerca. Últimamente más lo último, esa es la realidad. En febrero hará tres años que salí. Yo empiezo a contar mi carrera desde ahí. Porque cuando estaba dentro era como estar en casa.

Al ritmo que llevas de colaboraciones, en nada te habrás hecho toda Latinoamérica. ¿Te ves como amiga y residente en Miami de Rosalía?

A veces se me pasa por la cabeza. Pero me encantaría vivir siempre aquí porque soy muy fan de España. No me importaría irme una temporada por motivos laborales, aunque como proyecto de vida, de tener hijos en un futuro... tipo 30 años o así... bueno, treinta y pico... Depende de mi situación. Si a los treinta y pico lo estoy petando, pues no. Pero si no lo estoy petando, ya veré.

Aitana lleva top y minifalda de brillos de Victor von Schwarz y botas altas puffer de Fenty. La mirada luce despejada con el corrector de alta cobertura Touche Éclat High Cover de YSL Beauté.

Te preguntaría por la maternidad, pero creo que igual es mejor que me digas qué consideras tú qué es “petarlo”...

Hacer una gira mundial, que no he hecho. Creo que es algo super difícil.

¿Y cuándo piensas que te pondrás a ello?

Depende de cómo vengan las cosas. Si el nuevo disco gusta mucho, igual puedo hacer una gira mundial pronto. Si solo se escucha en España, será aquí. Y si no, pues me quedaré en casa....

Es curioso, porque esa ambición choca con la imagen que proyectas de chica dulce. ¿Te molesta que se tenga esa idea de ti?

Soy consciente y la verdad es que no es algo que quiera cambiar. No sé si en mi vida privada soy una persona dulce, pero sí muy natural, muy normal.

Sin embargo, en tus videoclips das la imagen contraria. Haciendo boxeo en Friend de semana con Danna Paola y Luísa Sonza o como super heroína en Enemigos con Reik...

Me gusta mostrarme como una mujer que sabe sacarse las castañas del fuego solita. Me sigue tanta gente joven que, de alguna manera, quiero reflejar que las mujeres podemos hacer lo que nos propongamos. Las cosas están cambiando. Pero tenemos que seguir luchando, porque en caso contrario no avanzaremos. Yo me considero feminista y creo que todo el mundo debería serlo. Huir del cliché de mujer objeto en mis vídeos es muy importante para mí.