Despertarse, ducharse, acondicionarse el pelo, lavarse la cara, hacerse la rutina de skincare, maquillarse... Así suena el día a día de muchas de nosotras, pero ¿realmente tenemos conciencia de los productos que utilizamos? Y no me refiero únicamente a los ingredientes que contienen, sino también a su formato.

Productos ideales para comenzar en la cosmética sólida