María José Llata, peluquera: "El pelo debe limpiarse cada vez que esté sucio"

El cabello es una de nuestras preocupaciones recurrentes. ¿Cómo puede crecerme más rápido? ¿Cómo le doy brillo? son algunas de las preguntas que me hago cada día, aunque sin duda la que más preocupaciones me causa es cómo puedo conseguir que mi cabello dure mucho más tiempo limpio. Tengo una melena con tendencia a engrasarse y no consigo que tenga un aspecto fresco más de un día. 

Puede que sea fruto de manipular en exceso mi pelo o que añado varias productos capilares de peinado para que me aguante durante todo el día y no es muy recomendable, pero la cuestión es que no consigo que dure limpio más de un día y me toca lavarlo todas las noches. 

La realidad es que el pelo sucio no solo viene provocado por la manipulación, hay otros factores como las glándulas sebáceas del cuero cabelludo, la influencia hormonal, falta de enjuagado en el momento de la ducha, la alimentación o hasta una mala elección del champú.

No existe un cabello completamente igual, porque a pesar de que solo nos fijemos en el resultado final, la apariencia de nuestro cabello viene influenciada por cuestiones internas de nuestra salud. 

Eso sí, hay ciertas partes fundamentales de nuestra rutina capilar que pueden ayudarnos a equilibrar la producción de sebo. No es ninguna fórmula mágica, tendrás que tener en cuenta los otros aspectos que te comentábamos, pero son las normas que emplean las peluqueras en los salones para que tu cabello brille y tenga un aspecto sedoso y con volumen.  

Acudimos a la peluquera María José Llata, presidenta de Intercoiffure España y directora de Peluquería Llata Carrera, para descubrir cuáles son los mitos que rodean a los lavados del cabello. ¡Toma nota y eleva el aspecto de tu melena como una profesional!

Qué champú debemos utilizar para un cabello limpio

Lo primero, debemos derribar mitos y acabar con bulos que existen respecto a la limpieza capilar. Puede que te sorprenda lo que te vamos a desvelar de la mano de la experta María José Llata.

Actualmente todo el avance de la salud capilar se enfoca en la limpieza del cuero cabello y hay una creencia popular respecto a este que errónea: "La idea de mantenerlo 'más tiempo limpio' es contradictoria, ya que debe limpiarse cada vez que esté sucio. No existe una regla universal para todos los tipos de cuero cabelludo".

 Por lo tanto, los trucos que vemos en redes sociales de rutinas de lavado para prolongar la duración de tu cabello limpio pueden estar alterando a tu cuero cabelludo con unos pasos inadecuados para tu tipo de piel. 

Por ejemplo, la peluquera nos explica cómo pueden variar las condiciones entre los diferentes tipos: "Algunos cabellos pueden estar desestabilizados, con glándulas sebáceas que producen un exceso de grasa, mientras que otros pueden tener glándulas sudoríparas muy activas, acumulando toxinas y sal que no son beneficiosas y pueden contribuir a la caída del cabello".

Entonces, ¿qué debemos hacer? ¿De qué nos fiamos realmente? Tranquila, hay una regla imprescindible para darle el mejor acabado a tu melena: "Debemos evitar los champús que dejan un alto residuo, especialmente los de supermercado, ya que suelen contener numerosos derivados petroquímicos insolubles en agua", señala.

Tal y como nos explica María José Llata, estos residuos se acumulan a largo plazo y generan el temido aspecto sucio y otros problemas de rotura, pérdida de volumen, etc. Al principio, el cabello puede tener una apariencia normal, pero con un uso continuado de ellos empiezan a generar problemas de acumulación capilar. 

Una vez tenemos filtrados los champús y hemos eliminado los del supermercados de nuestra rutina, ¿cuál es el adecuado? Debemos fijarnos en nuestro cuero cabelludo con la ayuda de un profesional. "Hay mucha desinformación y autoengaño entre los clientes. Muchos creen tener el cabello seco, cuando en realidad el problema radica en un cuero cabelludo desequilibrado. Como consecuencia, recurren a champús con ceramidas y otros ingredientes que dejan residuos, agravando el problema", confiesa la peluquera. 

Lo mismo ocurre con el mito de que ingredientes como el limón o el romero pueden ser nuestros salvavidas a la hora de lavar el cabello: "Son astringentes y pueden ser beneficiosos (no en formato alcohólico), pero no sirven para lavar el cabello, por lo que deben aplicarse después de un champú adecuado". 

La clave está en escoger un champú acorde a tu cuero cabelludo con la ayuda de un profesional. "Lo ideal es utilizar un champú que limpie bien sin restregar en exceso la fibra capilar. Además, es fundamental hidratar y nutrir el cabello con una buena mascarilla y sellarlo correctamente con un acondicionador". 

¿Podemos ayudarnos de otros productos para mantenerlo limpio? María José Llata recomienda el uso de champús en seco como una solución temporal para absorber el exceso de grasa y devolver al cabello un aspecto limpio y con volumen. "No se debe abusar de ellos, ya que no sustituyen al lavado tradicional y su uso excesivo puede afectar la salud del cuero cabelludo", recomienda. 

También pueden ayudarnos los sprays de antiencrespamiento para proteger el cabello de la humedad y evitar que se ensucie rápidamente. "Estos sprays forman una barrera contra la humedad, manteniendo el cabello limpio y manejable por más tiempo".

3 champús perfectos para una buena rutina de lavado con efecto glow

El Full Shampoo de Living Proof mejora la apariencia de tu cabello con un extra de volumen y cuerpo de larga duración, además de mantener el cabello más limpio y saludable por más tiempo. Es bueno para tu cabello gracias a su formulación sin sulfatos, parabenos, ftalatos, y formaldehído.

Este champú de Ouai está compuesto por un concentrado con vinagre de sidra de manzana que se encarga de limpiar profundamente la suciedad, el aceite y las impurezas. También elimina la acumulación de productos de peinado y depósitos de agua dura. ¡Frescura, limpieza y mucho brillo!

Este champú de la marca Bioderma está formulado sin detergente y es perfecto para las personas que deben lavar su cabello frecuentemente, tantas veces como sea necesario. No elimina las propiedades naturales del cabello y respeta a tu cuero cabelludo (incluso si es frágil).