Entre todos los problemas de piel, el acné es la primera preocupación en pieles jóvenes. Y de manera puntual también en pieles adultas. La buena noticia es que el acné no es irremediable. Suele aparecer en cuello, barbilla y mejillas, la llamada zona "U" y se manifiesta en forma de pequeños granos internos e inflamados debajo de la piel. La causa de este acné es la grasa que generan las glándulas sebáceas, obstruyendo los poros de la piel. Con ello se facilita la producción de bacterias, que crean una infección y una posterior inflamación del poro. "Una buena rutina facial es imprescindible para mantenerlo a raya y uno de los activos más eficaces es el ácido salicílico", explica Elisabeth Álvarez, CEO de Inout. Te explicamos todo lo que puede hacer por tu piel este activo infalible.

Qué es el ácido salicílico

El ácido salicílico es un Beta Hidroxiácido (BHA) que funciona como exfoliante, elimina las células muertas de nuestra piel y limpia los poros. Debido a su capacidad de exfoliar de dentro hacia fuera y de penetrar en los poros, se ha vuelto un ingrediente imprescindible en las rutinas anti-acné, ya que se encarga de prevenir y eliminar la aparición de puntos negros, así como las manchas en la piel. "Además, tiene propiedades antiinflamatorias y antibacterianas. Gracias a su liposolubilidad, penetra muy bien en las áreas oleosas de la piel y extrae con facilidad las células muertas que obstruyen los poros", comenta la dermatóloga Andrea Combalia. 

Beneficios del ácido salicílico

Es el mejor ácido para limpiar poros y acabar con los granitos. "La diferencia con otros ácidos, como el glicólico o el láctico, es que penetra más en la piel y la limpia en profundidad. Acaba con los puntos negros y disuelve la suciedad que tapona los poros. Es ideal para pieles grasas, con puntos negros y acnéicas", dice Elisabeth Álvarez. Además, exfolia la piel en profundidad, elimina el exceso de sebo, facilita la renovación celular y difumina manchas, lesiones y arrugas. Es un imprescindible para terminar con las imperfecciones cutáneas y devolver la luz al rostro.

Cómo utilizar el ácido salicílico

El ácido salicílico se encuentra en muchos productos como limpiadores, tónicos, exfoliantes, mascarillas, sérums e hidratantes. "Se puede aplicar por la noche o por el día. Si lo utilizas como limpiador recomiendo que lo dejes en el rostro unos minutos antes de enjuagar. Pero es importante incluirlo en un paso de la rutina posterior para que se quede en nuestra piel y trabaje de forma prolongada. A mi me gusta utilizarlo en formato loción o en sérum porque son texturas  ligeras que penetran muy bien en la piel", explica Elisabeth Álvarez. Los cosméticos que se utilizan en casa contienen ácido salicílico entre un 0,5 % y 2 %. También se utiliza en las exfoliaciones químicas en centros de estética con concentraciones van desde un 20 % hasta un 30 %. Se recomienda empezar en casa con concentraciones bajas para ver cómo reacciona la piel e ir subiendo poco a poco.

A continuación, te recomendamos una selección de productos con ácido salicílico, sea cual sea tu necesidad: acné puntual, rutina diaria o exfoliación semanal. Acaban con las imperfecciones y dejan la piel limpia y radiante.