3 errores de cejas que cometemos sin querer a los 50 y suman años

Nunca subestimes el poder de las cejas a través de su cuidado y un buen diseño, ya que son un rasgo que puede cambiar tu rostro por completo. Juegan un importante papel a la hora de enmarcar la mirada, hasta tal punto que contribuyen a que nuestros ojos se vean más grandes, aportan armonía al rostro e incluso expresividad. De hecho, son capaces de que nos veamos más jóvenes y, por el contrario, también de avejentarnos con un solo gesto.

Cuando nos ponemos pinza en mano modo ‘do it yourself’ es para echarse a temblar, lo dicen todas las expertas, ya que a veces tendemos a depilar las cejas de más o de forma inadecuada y el resultado no es precisamente el que esperábamos. Sobre todo a partir de los 50 años, cuando aparecen las primeras canas y nos da por arrancar pelo a discreción.

“El error principal con nuestras cejas a partir de los 50 años es no cuidarlas, no darles la atención que se merecen y no asesorarnos bien. Seguir utilizando maquillaje antiguo, formas antiguas que ya no se usan y seguir solo los consejos de la abuela. Hoy día existen distintas herramientas y técnicas para mejorar nuestras cejas y por ende nuestra apariencia”, comienza advirtiéndonos Claudia Romero, CEO de Mírame Lashes & Brows. 

Con la ayuda de esta experta en extensiones de pestañas y diseño de cejas, te explicamos qué 3 grandes errores puedes estar cometiendo con tus cejas en la actualidad. ¿Quieres empezar a rejuvenecer tu rostro desde ya? Pues toma nota.

Error número 1: los diseños de cejas que deberías dejar atrás

No sólo nos ha sucedido con el cabello, sino también con las cejas. Nos referimos a que, con el paso de los años, abogamos por la naturalidad en lugar de cejas extremadamente finas, redondeadas o de aspecto artificioso. La especialista afirma rotundamente: “los diseños que nos suman edad son los que ya no están de moda. En cuestión de cejas, yo diría que las tendencias van por décadas”.

¿Cuáles son los diseños que han quedado atrás? “En los 60’s y 70’s la inconfundible modelo Twiggy puso en tendencia las cejas finas y redondas. En los 90’s seguimos con la misma tendencia pero aún más finas y muy depiladas. Por lo cual desde el 2000 sufrimos las consecuencias, ya que la moda nos lleva a unas cejas más pobladas, con formas más acordes a nuestro rostro”, puntualiza.

Por lo tanto, unas cejas pobladas son la respuesta a ese factor antiedad que le pedimos, ya que, como apunta la experta, “nos permiten llevarlas con su forma natural, más definidas, despeinadas y hasta en distintos tonos como el pelo”. A lo que añade: “Como especialista con más de 10 años de experiencia, la forma que nos rejuvenece es la propia natural. Cejas pobladas, sin depilar, es signo de juventud y esto es lo que buscan todas desde hace años”.

Pero ¿qué pasa si nuestras cejas ya no están tan pobladas? Claudia Romero nos cuenta que, en esos caos, se recurre a diferentes técnicas y herramientas: “desde maquillaje, sombras, lápices, ceras, geles, tintes, laminados y sérums, hasta microblading y otras pigmentaciones en caso de que busquemos una solución más inmediata”.

Error número 2: arrancarte las canas

Las canas en las cejas son unos de los grandes interrogantes porque ¿qué hacemos con ellas? La primera reacción suele ser coger unas pinzas y arrancarlas, pero ya te adelantamos que no es la solución. “Si encontramos canas en nuestras cejas las teñimos, sobre todo si cumplen un papel importante en su forma, si están fuera de lugar y no la necesitamos para lograr la forma ideal la depilamos”, nos confirma Claudia Romero.

Error número 3: un método de depilación inadecuado

¿Eres de las que se hace la cera en las cejas? Pues te estás haciendo un flaco favor. “La depilación con hilo es la que más recomiendo porque no genera flacidez en el músculo”, comienza señalando la experta. Eso sí, “en pieles más maduras simplemente hay que ir con más cuidado y tensar aún más la piel para no hacer daño”, nos advierte.

Esta sería la técnica idónea para las áreas en las que queremos eliminar el vello, sin embargo, “donde no queremos que pierda fuerza, con cuchilla. La cuchilla ayuda a recuperar cejas y no eliminar el vello definitivamente”, puntualiza la especialista.

Depilación con hilo paso a paso: la mejor técnica a partir de los 50

La depilación mediante hilo de algodón se ha convertido en la más popular en los últimos años por sus grandes beneficios: mayor durabilidad, gran precisión, no genera reacción en pieles sensibles, previene la aparición de arrugas porque no se estira la piel… 

Este método de origen oriental extirpa todo el folículo piloso, lo que proporciona una duración de unas 6 semanas. Para lograrlo, el “hilo de algodón se estira a lo largo del vello no deseado, con un movimiento de torsión se atrapa el pelo en un mini lazo, y se levanta el pelo justo fuera del folículo”, explican desde Mírame Lashes & Brows, antes de detallarnos su paso a paso:

1. Corta un hilo de aproximadamente 18 cm de largo y ata los extremos juntos, creando el círculo. 
2. Mantén un extremo del círculo con el pulgar y, con el dedo corazón de una mano, toca el otro lado entre 5 y 8 veces. 
3. El movimiento en un lado de los dedos es para abrir el círculo que forman el dedo y el pulgar. Mientras que el otro lado se cierra, mantén ligeramente el hilo con la tensión en todo momento (y viceversa) para llevar el nudo de vuelta. 
4. Mantén en posición y repite el movimiento anterior para hacer el nudo y para mover y recoger el pelo del folículo. 

Finalmente, nuestro sincero consejo: lo mejor para dar con el diseño de cejas adecuado y depilarte con hilo de forma correcta es ponerte en manos de especialistas. Sabrán aconsejarte acerca de la forma que más armoniza con tu rostro, realzando tu mirada y equilibrando tus facciones. 

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