Cuando decoloramos el cabello lo que hacemos es, literalmente, abrir la cutícula y "matar" nuestro pigmento natural. Por lo que, evidentemente, se trata de un proceso muy agresivo que debilita el pelo, dejándolo mucho más poroso, seco, quebradizo y propenso a daños. De ahí que Olga G. San Bartolomé, peluquera y experta en cabello, siempre nos asegure que "no tiene las mismas necesidades un cabello que nunca ha sido tratado con agentes químicos que otro teñido o con mechas".
Un pelo teñido o con mechas necesita de cuidados mucho más intensivos y específicos para contrarrestar lo máximo posible los daños producidos por la decoloración. Precisamente por ello, los champús y mascarillas reparadoras son nuestros mejores aliados.
Mª José Llata, directora de Peluquería Llata Carrera en Cantabria, siempre recomienda prestar atención a los productos que lleven ingredientes "como el colágeno o el aceite de argán", aunque a estos se le suman también la queratina, los aceites esenciales, las proteínas y las vitaminas, ya que reparan el cabello desde el interior y ayudan a cerrar la cutícula para reducir la porosidad del cabello y mejorar la salud capilar.
Yo llevo casi 10 años echándome mechas muy rubias y, además, suelo hacer uso de herramientas de calor como el secador o la plancha en invierno, ya que tengo el pelo rizado/ondulado. ¿Qué significa esto? Que, efectivamente, mi cabello está expuesto a un desgaste constante debido a los procesos de decoloración y el uso frecuente de estas herramientas.
Ahora bien, gracias a las recomendaciones de mi peluquero de confianza, Leo Acosta, de Peluqueros Leo en Granada, y a los conocimientos que he adquirido a lo largo de estos años como periodista de belleza, he conseguido que mi pelo no esté tan dañado como cabría esperar. ¿Cómo lo he logrado? Principalmente, usando de forma constante productos reparadores e hidratantes, como champús sin sulfatos, mascarillas nutritivas y tratamientos específicos para cabello teñido o dañado.
Cómo cuidar un pelo seco y dañado con mechas
Mantener sano un cabello seco y dañado con mechas no es tarea fácil, pero sí posible. Esta requiere de una rutina específica que ayude a restaurar la salud y vitalidad del pelo. Algunos de los consejos que siempre me da Acosta son los siguientes:
- Usar champús sin sulfatos: Los sulfatos pueden ser demasiado agresivos para un cabello que ha sido decolorado, ya que eliminan los aceites naturales y resecan aún más el pelo.
- Apostar por mascarillas reparadoras intensivas: Sobre todo por aquellas con ingredientes como el aceite de argán, la manteca de karité, la queratina y el colágeno, que son conocidos por restaurar la estructura capilar y aportar suavidad y brillo.
- Rematar con aceites nutritivos: Después de cada lavado, aplicar unas gotas de medios a puntas de aceites nutritivos puede ayudar a proteger el cabello, así como a aportar un brillo saludable.
- Reducir el uso de herramientas de calor: Intentar evitar el uso del secador y la plancha, y, por supuesto, utilizar siempre un protector térmico antes de su uso.
- Sanear puntas regularmente: Cortar el pelo cada 2-3 meses ayudará a que se mantenga más sano y las puntas estén menos quebradizas.
La mascarilla de reparación intensa de Wella Professionals que protege e hidrata el cabello seco y dañado
El uso de mascarillas reparadoras resulta fundamental si quieres lucir una melena sana, hidratada y con brillo. A lo largo de todos estos años, he probado varias; algunas han sido mejores y otras peores. Sin embargo, sin duda, una de las mejores que he probado es la mascarilla de reparación intensa de Wella Professionals. Esta mascarilla se ha convertido en un aliado esencial en mi rutina capilar, ya que nutre profundamente y repara el daño causado por la decoloración y el uso de herramientas de calor.
La mascarilla de reparación intensa de Wella Professional está especialmente diseñada para todos los tipos de cabellos dañados y débiles, especialmente para aquellos con mechas. Está formulada con aminoácidos de seda que penetran profundamente en la cutícula para reparar el cabello desde adentro hacia afuera con resultados de hasta un 95% menos de rotura. Además de lípidos micronizados que reparan la estructura de las fibras capilares del cabello hidratándolo, fortaleciéndolo y dándole brillo.
También cuenta con una fórmula avanzada con tecnología Silksteel Fusion que protege el cabello contra la rotura. Aunque, sin duda, una de las cosas que más me llamó la atención es que, además, actúa como protector térmico en el proceso de secado. Lo que lo convierte en la mascarilla reparadora ideal para aquellas que, como yo, abusan del secador y las planchas de pelo.
¿Otra ventaja a destacar? Que protege el cabello de los metales pesados, sustancias nocivas presentes en el agua.
Otra mascarilla reparadora ideal para pelos secos y dañados con mechas
Otra muy buena opción para cabellos secos y dañados producidos por la decoloración sería la mascarilla de reparación profunda de Elaimei. Esta cuenta con ingredientes nutritivos como el colágeno, aceite de argán marroquí, esencia de maca y hierbas naturales. Una fórmula perfecta para revivir y nutrir hasta el cabello más dañado.
Entre sus múltiples ventajas se encuentra su capacidad para aumentar los niveles de humedad del cabello e hidratar y nutrir profundamente el cuero cabelludo y los folículos pilosos, consiguiendo así minimizar las puntas abiertas. Además, su textura cremosa facilita la aplicación y se absorbe rápidamente, lo que permite que los ingredientes activos penetren en la fibra capilar de manera efectiva.
Cabe destacar que, al contener aceite de argán marroquí, proporciona una protección adicional contra el calor.
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