Entramos en la casa de Maribel Verdú, la presentadora de los Goya 2025: colores neutros tendencia, salón elegante y muchas plantas

A escasas semanas de la 39º edición de los Premios Goya, todos los ojos están puestos en los nominados y los maestros de ceremonias que se encargarán de amenizar la gala. Una celebración que cada año siguen miles de personas con atención. Es por eso que el presentador o presentadora de cada edición juega un papel decisivo para determinar lo interesante, entretenida o amena que nos parezca a los espectadores.

Aunque todavía falten varias semanas y no hayan querido desvelar el tono o los secretos que tendrán estos premios, nos atrevemos a pronosticar un éxito rotundo para las audiencias de este 2025, porque la encargada de conducir la gala será, ni más ni menos que Maribel Verdú. La madrileña con dos Goyas a sus espaldas (2008 y 2012) y once nominaciones, vivirá la experiencia esta vez desde el escenario.

En busca de pistas que nos adelanten las sorpresas previstas para la ceremonia, hemos echado un vistazo a la cuenta de Instagram de la actriz. Sobre los Goya no hemos visto nada, pero sí nos ha sorprendido encontrar imágenes de su casa hasta ahora desconocida más allá de su círculo más íntimo.

Un salón sencillo, elegante y con muchas plantas

El pasado 31 de diciembre, Maribel Verdú despedía el año con un vídeo de Instagram donde deseaba lo mejor a sus seguidores y presumía de nuevo corte de pelo. Grabado desde su casa, podíamos apreciar discretamente las paredes de lo que parecía el salón.

Decoradas con un espejo muy sencillo de puntas redondeadas, la presentadora de los Goya lo había decorado, suponemos que por Navidad, con una guirnalda de luces cálidas. Sin grandes estridencias, pero que aportan un toque distintivo a las paredes blancas. Un patrón que se repite con el resto de elementos.

No conocemos personalmente a la actriz, pero estamos seguras de que es una plant lover. En el mismo vídeo, apreciamos una pequeña maceta colocada sobre una mesita tan sencilla que parece un pequeño taburete. A su lado, una lámpara de pie con soporte metálico negro y una pantalla XXL redonda a contraste. Un diseño que, aunque no se aprecia del todo por el ángulo de la grabación, parece de estilo nórdico.

Pero esa pared que vemos detrás de la actriz, sigue hasta llegar a una estantería blanca, en sintonía con el resto de la decoración y repleta de libros. Algo que no nos extraña conociendo la afición de Maribel por la lectura.

Aunque si existe un detalle de este salón que ha capturado toda nuestra atención, ha sido el cuadro de la Gran Vía madrileña que cuelga de la pared. Una pintura que pertenece al artista Antonio López y que se puede visitar en el Museo Thyssen-Bornemisza.

Este cuadro es todo un icono para la capital española. El artista, que retrata una de las calles más emblemáticas y concurridas de la ciudad completamente vacía y de madrugada, dedicó varias obras más a la belleza arquitectónica de esta avenida.

Este cuadro es otra demostración más, no solo del buen gusto de Maribel por la decoración o su amor por la ciudad que la ha visto crecer como actriz y alcanzar todos sus éxitos; sino también de su personalidad tan polifacética para las artes, desde el cine y el teatro, hasta la literatura o la pintura.