Si en algo se ponen de acuerdo la mayoría de las mujeres apasionadas por la moda es en la importancia que tienen los pantalones vaqueros en el armario. Estos son un básico que poco a poco se han ido colando en el estilo de casi cualquier mujer. Y es que su versatilidad ha dado lugar a que sean pocas las que se resistan a llevarlos. 

No obstante, los pantalones vaqueros no permanecen ajenos al ciclo de las tendencias. Aunque existen los modelos más básicos, que pueden durar años y años en el vestidor, la mayoría de ellos tienen algún detalle que delata a qué época pertenecen. Por eso, conviene tener controladas las tendencias que influyen en esta prenda, para saber cuáles tenemos que sacar del armario y dejar sitio a las nuevas corrientes.

Aprende a distinguir los vaqueros que se llevan de los que no

Si echamos la vista atrás, los pantalones vaqueros son una prenda que data del siglo XIX. Fueron concebidos como ropa de trabajo resistente para mineros y trabajadores del Oeste de Estados Unidos y ahí la rudeza de su tejido. Y es que fueron fabricados inicialmente con tela de lona y evolucionaron hacia lo que hoy conocemos como denim, un tejido de algodón resistente que se caracteriza por su textura fuerte y duradera.

Estilo lujo silencioso
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Quizás este cambio en el material, que coincidió con la adopción de los jeans por parte de la cultura juvenil en la década de 1950, es de lo poco que queda hoy en día de los pantalones vaqueros originales. Además, los característicos pespuntes en color cobre y los remaches metálicos son sus señas de identidad.

Sobre esta base, diferentes patrones, distintos lavados y teñidos y detalles como aplicaciones de pedrería, rotos, descosidos, bordados y todo lo que puedas imaginar forma parte del universo infinito actual de esta cotizada prenda que usamos 24 horas al día, siete días a la semana.

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