Cómo ir vestida a una boda de invierno: 24 vestidos y looks fáciles de copiar para ser la más elegante

Si es de día, los vestidos en colores de moda como el mostaza con una apuesta segura. Añade un toque diferente con un modelo que sea vaporoso y que cuente con mangas espectaculares. 

Puedes apostar por un vestido con uno de los escotes más elegantes, como es el off the soulder. Llevar los hombros al aire con vestidos de manga larga resulta sexy y glamuroso. Si no tienes el pelo corto, nuestro consejo es que te lo recojas. 

Se veía venir, ya que ha sido el favorito de miles de famosas en las red carpets de todo el año. De este modo, y en términos de apliques, los lazos se han convertido para el otoño lo que las flores 3D fueron para la primavera.

El gris se ha convertido en el tono favorito de estos meses, y nos encanta. Es sofisticado, elegante, y si apuestas por vestidos tipo túnica como este, el resultado será de sobresaliente.

Los plisados son un detalle elegantísimo que sienta bien a todas y que te permitirá conseguir una apariencia a la altura de cualquier evento que tengas. No son para nada aburridos, tan solo tienes que comprobar todo lo que pueden ofrecerte en vestidos originales. 

Opta por vestidos de manga larga en tonos sólidos y vivos como el azul royal o el mostaza si es una boda de día. Dan un toque juvenil que favorece a todas y siempre son elegantes. 

Un infalible que nunca jamás falla en las bodas de invierno son las capas de terciopelo. Estarás elegantísima y no dejarás indiferente a nadie. 

Es uno de los colores más llevados por las invitadas más elegantes, y razones no faltan. El borgoña favorece a todas y es perfecto tanto para el día como para la noche.

¿Quién dijo que los vestidos elegantes no podían ser estampados? Lo único es que hay que escogerlos bien. Además, aportan un toque juvenil que sienta estupendamente. 

Si es un evento de día, permítete lucir piernas con un vestido corto. Añade unas sandalias o zapatos sin pulsera y confía en el poder femenino de detalles como las mangas abullonadas. estarás de diez. 

El marrón chocolate se ha convertido en una opción segura con la que podrás encontrar el vestido de tus sueños. La pruba está en este modelo de manga larga y volantes que nos parece elegantísimo. 

Si buscas huir de los vestidos tradicionales, siempre puedes decantarte por un dos piezas ultrafavorecedor. Te reocmendamos que optes por los tonos tierras y teja. En otoño e invierno sientan estupendamente. 

El terciopelo es un clásico en las bodas de invierno, por lo que, siempre es una apuesta segura con la que te verás favorecida. Especialmente si añades detalles como el del lazo en el pelo. 

Son femeninos, elegantes y muy cómodos. Toda una apuesta segura para quienes buscan lo mejor de los dos mundos. Además, los hay muy originales por si buscas una apuesta diferente. 

Un vestido negro nunca falla. Sobre todo, si tiene silueta de A y escoite cuadrado. Eso sí, déjalo para tus bodas de noche. Por el día el negro no tiene el beneplácito del protocolo. 

Hay tonos que nunca fallan, y el rojo es uno de ellos. Favorece a las rubias y a las morenas. Combínalo con accesorios de color rojo para un efecto monocroma o con dorados. 

Es una de las apuesta más diferentes y bonitas para las bodas de invierno, porque lejos de parecer viejuno, este tres piezas de tweed es una opción femenina, elegantísima y muy juvenil. 

Si tu vestido es de manga larga, quizás puedas permitirte hacer uso de los escotes en la espalda. Son un imprescindible que nunca jamás falla y siempre sientan fenomenal, aportando un toque sexy.

Hay quien está en contra del negro en las bodas, pero lo cierto es que a nosotras nos apasiona. Todo depende del vestido y de cómo lo combines. Pero si tu apuesta es tan elegante como la de Leonie Hanne, la pregunta es ¿por qué no?

Los metalizados son una buena opción para presumir de tendencias y de la elegancia más inaudita. Sobre todo, si escoges modelos tan bien equilibrados como este con mangas abullonadas y plisados. 

Otro de los tonos que te hará destacar en las bodas es el lila. Más teniendo en cuenta si optas por combinarlo con otras tonalidades como el rojo o el verde. El resultado te quitará años de encima. 

Ideales para las bodas de invierno de día, son perfectos para aquellas que no quieren complicarse mucho la cabeza. Se ven elegantes y siempre quedan bien con un bolso mono y unos pendientes largos.

Colores como el teja o el azul petróleo no pasan de moda, son ideales par reutilizar en el futuro y sientan bien a todas. Además, podrás usarlos tanto en bodas de día como en bodas de noche. 

Escoger un vestido midi con un estampado favorecedor para una boda siempre es una opción que vale la pena tener en cuenta, ya que resulta hiperfavorecedora y te verás alta y preciosa durante toda la noche.